Nota de interés: el enclave de La Aguilera se ha convertido ya desde hace unos años en referente en cuanto a vinos de calidad, las uvas que aquí se producen provienen de viñedo viejo a mucha altitud, por lo que importantes Bodegas del panorama nacional están iniciando nuevos proyectos en la zona. Cair es pionera en este sentido, con este vino se pretende poner en valor precisamente las características especiales de estos suelos, por lo que las uvas utilizadas son únicamente del municipio de La Aguilera, Ribera del Duero alta, vino de corte moderno y máxima calidad.
Viticultura y Elaboración:
Viñedos de más de 45 años con una altitud comprendida entre 820 y 870 m, ubicados en laderas y terrazas con varias orientaciones, rodeados por monte bajo, pinos y encinas, suelos franco arcillo-arenosos y franco arcillosos. Vendimia manual en cajas de 11 kg, maceración prefermentativa en cámara frigorífica para potenciar la expresión de la fruta en el vino, paso por de edad media de 25 años, rendimientos máximos de 4.500 Kg/ha, vendimia manual en pequeñas cajas, doble mesa de selección, primero racimos y posteriormente granos, fermentación alcohólica en depósitos de acero inoxidable, maloláctica en barrica.
Crianza de 14 meses en barricas de roble francés y americano, 50% barricas nuevas y 50% de segundo vino.
Ficha de Cata:
Color rojo picota bien cubierto, manteniendo tonos violáceos en el ribete. En nariz se muestra complejo, destacando la fruta negra madura, notas florales, balsámicas y de monte bajo, gran equilibrio entre los aromas primarios de tierra y los aromas más especiados, los toques frutales y florales son típicos de la zona de La Aguilera ya que la altitud y la situación de los viñedos entre los montes de la meseta castellana, facilitan una buena maduración y aportan gran frescura y complejidad. En boca se muestra sabroso y potente, apareciendo sensaciones frutales, frescura, un tanino elegante y una gran persistencia final.
Particularidades de la añada 2015.
Este año se caracterizó por contar con temperaturas ligeramente más elevadas de lo normal durante la primavera y los primeros meses de verano, en septiembre y octubre, durante la maduración, las temperaturas diurnas máximas fueron moderadas y las nocturnas muy bajas, lo que favoreció un adecuado proceso de maduración. Las precipitaciones a lo largo de ese año fueron escasas pero hicieron aparición en los momentos esenciales. La clave durante la vendimia fue la estabilidad meteorológica, lo que favoreció la recogida de la uva en el momento exacto, fecha de vendimia 25 de septiembre, rendimiento por hectárea 3.000 kg, 76.619 botellas.